23 de junio de 2011

A veces es tan difícil seguir adelante que solo queremos una señal, un motivo, una razón para poder levantarnos y seguir cayendo, seguir aprendiendo de nuestros errores y alegrarnos de haberlos cometido aveces se necesita mucho, a veces no se necesita nada, solo fuerza para seguir adelante sin mirar atrás y sin arrepentirnos de lo que pudimos o no hacer. Todos vamos por la vida buscando ese tipo de señales milagrosas que nos impulsen a seguir o a quedarnos con algo, en vez de ir por ellas y cumplirlas nosotros.